RETO CONSEGUIDO I CROSS ALPINO TRASIERRA 2012: 2h:36':45"




Hay carreras y carreras, como hay experiencias y experiencias. Este fin de semana vivimos una: nuestra primera Trail Running de montaña. Una carrera y una experiencia única: I CROSS ALPINO TRASIERRA 2012. Única por el perfil duro y difícil, única por el calor asfixiante, única por la poca técnica en carreras de este tipo que tengo, pero... única por la organización (sobresaliente) , por el ambiente, por el olor del campo mientras sudábamos los kilómetros, por el paisaje, por saber que podemos aquello que nos proponemos.


El esfuerzo que se hace en una carrera de este tipo, aunque sea de 22 km como ha sido esta, es impresionante. En esta distancia, de medio maratón, sinceramente, podría ser comparable el esfuerzo físico al que se realiza en el Maratón, con la diferencia que la cabeza va algo más despejada y entretenida. Las piernas hay momentos en los que no responden, o no pueden más, o te tiemblan y tambalean tanto que te obligan a parar.

Pero ha sido acojonante, de verdad.

A las 9 h. estábamos en San Martín de Valdeiglesias con una temperatura que rondaba los 24º y que hacía presagiar el calor que luego pasaríamos. El entorno de la salida, junto a la fortaleza o castillo, precioso, la organización desde el inicio realmente increíble. Como era una prueba de pocos corredores (no creo más de 200), para recoger dorsal y chip no hubo mucho problema: por cierto que se recogía en el interior del castillo.


A las 10 h. SALIDA. Salimos 180 participantes en dirección a la montaña. Desde la salida tocaba subida. Clemente y yo no habíamos calentado prácticamente nada, como siempre, queríamos guardarnos un poco -jaja-.



Nos colocamos los últimos en salida para ir tranquilos y calentando. Vamos, para no molestar a nadie. En esta carrera no había crono para nosotros, había que terminar con fuerzas.En los primeros kilómetros ya se hacía notar el perfil que íbamos a tener. Uff! Cierto es que de momento todos vamos en grupo.



A los 3 km entramos ya en montaña con una vegetación diferente, el suelo ya entre rocoso y terroso y los subeybajas continuos.



Reconozco que esto de correr por montaña nada tiene que ver a correr por asfalto. También hace falta técnica, mucha técnica. Rápidamente nos dimos cuenta de lo patosos que somos. Las bajadas, a veces con pendiente, eran peligrosísimas. No podías frenar y tenías riesgo de lesiones en tobillos o resto de cuerpo por irte hacia abajo si no tenías cuidado o, también, si se iba el que venía pegado a ti por detrás.


A partir de los primeros toboganes se notaba aquellos corredores experimentados en montaña de los que no lo somos.



El ambiente y la fraternidad era estupendo en todo el recorrido. Hasta yo de vez en cuando me permitía alguna gracia, con ese humor que me caracteriza, fruto de una labrada experiencia en el mundo de la comedia.



Imagino que los primeros irían a todo meter, creo que el grupo mayor, el resto, llevábamos velocidades más o menos iguales. Los ritmos imposibles ya que durante las subidas, en algunos tramos, era tal el desnivel que imposibilitaba correr o andar deprisa.


El cansancio en las piernas, cada vez más cargadas, se hizo notar cuando bordeamos el pantano. Correr en arena para luego volver a pasar a la eterna subida de la 'V', fue terrible.


Pero casi parados, con un calor asfixiante, con ánimo y disfrutando de un paisaje inigualable, subíamos y subíamos, trotábamos y trotábamos…



En los avituallamientos mucha agua, algunos también sólido, y a seguir rompiendo las piernas.

Volvimos a llegar otra vez al pico y ya quedaban sólo los 5 km de bajadas y subidas cortas. Las piernas temblaban en muchos momentos y el ritmo de los llanos o mientras descendías ya ni siquiera podía ser alto.


El final se me hizo largo. Los dos últimos kilómetros deseaba terminar como fuera y parece estaban repletos de metros y metros y más metros de lo normal.

Pero entramos en meta en lo que fue nuestra primera carrera de montaña con un muy buen sabor de boca. Contentos, sonriendo y con un tiempo de 2h:36’:45”. Cualquiera puede pensar que es mucho, a lo mejor lo es si lo comparamos con nuestro tiempo en Medio Maratón (1h:40”), pero esto es otra cosa, esto es montaña y, sinceramente, estoy enormemente satisfecho.


He experimentado lo que se siente corriendo una Carrera Popular de 10 km., hemos hecho unas cuantas Medias Maratones, unos Maratones y una Ultra fondo de 104 km... correr un Cross Trail Running de 22 km con estos perfiles es total!!!

Cada uno pensará lo que quiera o desee, próximamente escribiré un artículo sobre lo que han sido y son mis sensaciones en esta experiencia que es el correr durante estos últimos tres años. Creo que más allá de modas, más allá de hábitos saludables, correr te genera un espíritu de libertad y superación inigualable; correr te permite hablar contigo mismo y encontrarte; correr significa descubrir tus defectos y tratar de corregirlos; correr te genera una mentalidad positiva como nada en el mundo. Me creo un coach no experimentado en lo profesional pero sí en el día a día de la vida: correr ayuda, implica, te humilla, te agacha y levanta, te hace sufrir y sonreír, te cambia la forma de pensar y sentir... corre!



Comentarios

  1. Las caras en la llegada de ¡¡joder-joder por fin llegamos¡¡ no tienen precio. Enhorabuena por la experiencia.

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    1. Muy bonito relato.Probaremos este terreno.

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